Del 14 de Diciembre de 2017 hasta el 19 de Enero de 2018
LA PROPORCIÓN SUBLIME
Dicen que el tiempo viene inclinado, aunque estoy convencido que nada tuerce los pilares de la buena obra. Resguardado en moradas de fuertes cimientos, con pedestales grávidos,en los que reposa y se asienta la Gran Matrona a la espera de suaves brisas, impertérrita a ventiscas y vendavales que le hagan dudar. Transfiguración pertinente de la comadre en Venus, Eva o mater Regina, transpirando fertilidad en las horas suspendidas. Todos los elementos se detienen ante la suave presencia de un ser que no se rinde frente a las escalas ancestrales de la supuesta proporción correcta.
Muchos términos han utilizado para definir los ajustes en la obra de Paco Luque, y todos pueden ser ciertos: desorbitado, exhuberante, rubensiano, sobredimensionado, o rotundo, pero todo se resume en lo que llamaremos su Proporción Sublime, ajena a los volúmenes mórbidos de otros autores. La fuerza no contradice el dinamismo y la exquisitez de sus “armas de bronce”. Recompone el modelo frente a la imagen más habitual de alterarlo, para hacer de la mujer el signo telúrico de la belleza fecundadora y fecundadora.
Tan enérgica como los pilares de un puente y, a la vez, tan liviana como para iniciar el vuelo; tan noble y mayestática como lujuriosa y espontánea. Antónimos que juegan a complementarios. Compendio de la propia vida manifestada en el aliento de una pieza modelada por Paco Luque.